El hombre fue identificado como Sixto Siri, propietario de la Gallera de la referida comunidad, quien fue llevado a la sala de emergencia del hospital doctor Antonio Yapor Heded, en donde recibió las primeras atenciones.
El hombre fue ingresado en estado agonico al hospital de Nagua.
Desde Nagua, fue necesario enviarlo a la Clínica Siglo XX1 de San Francisco de Macorís, debido a la gravedad que presentaba.
El veneno habitualmente es utilizado por desaprensivos para matar miles de camarones, cangrejos, jaibas peces y otras especies acuáticas.
El Gallero dejo una nota escrita en la que advertía que si no lo encontraban en la casa, que lo buscaran debajo de una mata de mango.
En lo inmediato no se establecieron las causas que llevaron a Sixto Siri, a tomar la fatal decisión.
Miembros de la Policía fueron vistos en la sala de emergencia del hospital de esta población, en planes de investigación.
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