Afirma que no hay títulos legales en Bahía de las Águilas

 

Rodolfo Rincón Martínez Viviano de León Santo Domingo El ex administrador de Bienes Nacionales, Rodolfo Rincón Martínez, afirmó ayer que no existen familias propietarias legales de los terrenos de Bahía de Las Á guilas, porque para que sea así tiene que existir una determinación de herederos y una sentencia emitida por el Tribunal Superior de Tierras. Rincón Martínez, quien ocupó el cargo de administrador de Bienes Nacionales por cuatro años durante uno de los gobiernos de Joaquín Balaguer, dijo que el proceso para que el Estado le venda terrenos a particulares es bien largo y complejo, por lo que tienen que existir evidencias y prueba de que cada uno de los que alegan tener títulos de esos terrenos, siguieron y cumplieron con los pasos que establece la Ley para adquirir una propiedad que pertenezca al Estado. “Lo que es de uno, uno no tiene que cedérselo a nadie”, dijo Rincón, al referirse al caso en el que Estado estaba negociando para cederle un 45% del valor de los terrenos de Bahía de Las Águilas a quienes afirman poseer títulos de propiedad de esos predios en la provincia de Pedernales. Martínez, quien también ocupó las funciones de secretario de Finanzas durante los gobiernos de Balaguer, dijo que en una ocasión el extinto líder reformista le recomendó que se cuidara mucho en el desempeño de sus funciones, porque hay dominicanos que son capaces de hasta sacar un título de los terrenos donde está ubicado el Parque Independencia. “Entonces, yo felicito la decisión del presidente Danilo Medina, porque puso el corazón al oído del pueblo dominicano, e hizo lo correcto, dejar eso en manos de los tribunales, ahora, los tribunales, la justicia no debe equivocarse, esos terrenos son del Estado y por lo tanto al Estado deben de volver; y si allí hay que desarrollar proyectos turísticos para el bienestar de la Región Sur, el país debe darle el apoyo al presidente de la República”, agregó Rincón Martínez. Dijo que si él fuera el Presidente no cayera en negociación con nadie, porque lo que es de uno no se puede negociar.