Entre tanto, todas las instituciones que forman parte del Comité Nacional de Emergencias están activadas y se ordenó hacer evacuaciones preventivas en las provincias bajo alerta roja y amarilla, para salvar vidas.
Gloria Ceballos, directora de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), dijo que existe la posibilidad de que la tormenta se convierta en huracán a medida que se aproxime a aguas del mar Caribe.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) emitió alerta roja para las provincias La Altagracia, Santo Domingo, San Cristóbal, Peravia, San Pedro de Macorís, La Romana, Azua, Barahona, Pedernales y el Distrito Nacional.
En alerta amarilla están Duarte, La Vega, Maria Trinidad Sánchez, Sánchez Ramírez, El Seibo, Hato Mayor, Monte Plata, Samaná, Bahoruco, San José de Ocoa, Independencia y Valverde.
En Verde figuran Puerto Plata, Espaillat, Hermanas Mirabal, Santiago, Dajabón, Santiago Rodríguez, Elías Piña y Montecristi.
Ceballos indicó que se espera que el centro de la tormenta, que tiene vientos máximos sostenidos en 85 kilómetros por horas y sus ráfagas pueden llegar a 120 kilómetros por horas, se ubique frente a la Capital próximo al mediodía de mañana.
Los efectos de la tormenta pueden tumbar ramas de árboles, afectar viviendas vulnerables, producir levantamiento de hojas de zinc, remover escombros, entre otros.
El director del COE, general Juan Manuel Méndez informó que en todo el país hay 3385 refugios para ser usados en casos de emergencia.
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